Habrá que ver en qué termina la reunión entre Imbroda y Santamaría, pero lo que es indudable es que esta cuestión preocupa mucho a los ciudadanos y, como ha expresado el propio presidente, a las autoridades melillenses Melilla siempre ha aspirado a una reforma de la Ley del Menor dado que las leyes que existen desde el año 1997 ya no permiten las expulsiones de menores extranjeros no acompañados (MENAs). Así, desde esa fecha en la que nuestra ciudad no acogía oficialmente ningún Mena -aunque todos recordamos a los niños de la calle de la época que deambulaban por la ciudad y que se dedicaban en su mayoría a la venta ambulante de chicles-, a la actualidad, en la que la cifra se ha disparado hasta más de 550 acogidos.
Un hecho que llevó al presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, a exponer en público el alto coste que supone para las arcas de Melilla la atención de estos Menas. Así ha tachado de "desorbitado" el gasto que dedica a la acogida de los menores, de más de diez millones de euros, frente al millón que transfiere el Estado.
Por ello ha anunciado que en la reunión que mantendrá la próxima semana en Madrid con la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, Imbroda le pedirá que el Estado asuma el coste de atención de los Menas.
"Son entre 560 y 580 los menores que tenemos a día de hoy, lo que conlleva alrededor de unos 10 millones de euros", ha dicho el presidente, para añadir que "el Gobierno central destina en subvención más de un millón de euros".
Juan José Imbroda ha explicado que "la competencia en materia de menores extranjeros no acompañados es de las Comunidades Autónomas, una competencia que recoge el estatuto de autonomía de Melilla y que fue transcrita en su día sin pensar lo que ocurriría en el futuro".
El presidente melillense ha apuntado que "el Gobierno central debe de entender que esto, no deja de ser un problema de inmigración, porque se trata de jóvenes que en vez de tener 19 o 20 años, tienen 15 o 12, y es algo que no podemos aislar, ya que la inmigración de menores se trata de un problema también nacional y europeo".
La primera autoridad melillense también hizo énfasis en el hecho de que no se debe jalear a los MENAs "sino decirles que deben estar en los centros, porque ahí cuentan con alimentación y con un techo, además de ser bueno para ellos y para la sociedad melillense".
Habrá que ver en qué termina la reunión entre Imbroda y Santamaría, pero lo que es indudable es que esta cuestión preocupa mucho a los ciudadanos y, como ha expresado el propio presidente, a las autoridades melillenses.
