La Ciudad Autónoma de Melilla se propondrá reducir un 10% la producción de residuos en el próximo Plan de Gestión Integral de Residuos, que será elaborado próximamente. No obstante, aún tendrá que esperar porque la Asamblea acordó ayer en un pleno extraordinario y urgente la prórroga del plan que está vigente por estar gestionado con fondos europeos. La prórroga salió adelante con la unanimidad de todos los grupos de la Asamblea, que coincidieron en aplaudir el objetivo de reducir la producción de residuos en un 10%, tal y como determina la ley nacional, e incluso algunos de ellos, como PSOE y Ciudadanos (C’s), pidieron que se incremente ese porcentaje, dado que Melilla recibe la mayor parte de los productos manufacturados. Coalición por Melilla (CPM) se mostró algo más reticente en este sentido al asegurar su portavoz, Hassan Mohatar, que si se consigue reducir el 10% de residuos generados en la ciudad “sería para ponerle no una calle, sino una avenida al consejero”, dado el incremento demográfico tan importante que ha registrado Melilla en los últimos años.
De hecho, Mohatar llegó a plantear la posibilidad de construir una nueva planta incineradora porque la actual sería “incapaz de absorber” la demanda para los próximos años, una idea que el PSOE rechazó en su turno de palabra al considerar que esto daría lugar a problemas de espacio.
El diputado socialista, Francisco Vizcaíno, solicitó además que se busque la posibilidad de reutilizar los lodos una vez tratados los residuos, además de plantear esta gestión con una mayor apertura a los ciudadanos mediante una gran campaña de concienciación.
Ciudadanos (C’s) también apuesta por una mayor concienciación de la población sobre este asunto para ir más allá en ese objetivo de reducir 10% de residuos, consiguiendo además la implicación de diferentes colectivos para hacer de Melilla una ciudad más limpia y ecológica, si bien lamentó que la Ciudad Autónoma apure los plazos también en este asunto.
El consejero de Coordinación y Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, confirmó la intención del Gobierno de contar con una “enorme participación” de todo el mundo en la elaboración del nuevo Plan de Gestión Integral de Residuos, que tardará unos 18 o 20 meses en estar listo, a pesar de que el actual podría seguir vigente más tiempo.
La decisión de elaborar un nuevo plan responde a que el Gobierno melillense “ha sido ambicioso” en este tema, para el que quiere reducir la producción de residuos y avanzar en el reciclaje en los hogares melillenses, además de prestar una especial atención al tratamiento de los lodos, las podas y el cartonaje que se genera en la frontera con Marruecos.
Se trata, en definitiva, de una “medida importante para el futuro de la ciudad”, lo que hace necesario marcar un nuevo camino, que se seguirá con el próximo plan que se elabore.
Emvismesa
Por otra parte, el pleno extraordinario celebrado ayer acordó por unanimidad la cesión gratuita de la finca dedicada al parking de la Plaza de la Cruz Roja, que la Ciudad Autónoma entregará a la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo de Melilla (Emvismesa) para que gestione esta nueva infraestructura.
