Buena jornada la disputada el pasado fin de semana para las chicas que dirige Pepe Andújar, ya que además de la gran victoria lograda el pasado sábado ante el Estuadiantes (3-2), los resultados le han acompañado y, aunque siguen en la sexta posición, se encuentran empatadas a puntos (23) con el cuarto y el quinto clasificado, el Almagro y el Monachil. El Torreblanca Melilla continúa viviendo un sueño del que el pasado sábado escribió otro capítulo al vencer a la escuadra sevillana del Estudiantes por 3-2.
Las de Pepe Andújar sumaron su quinta victoria consecutiva, no conociendo la derrota ni el empate desde el pasado19 de noviembre de 2016, cuando cayeron en el Lázaro Fernández ante el Alcantarilla (1-6).
La plantilla y el cuerpo técnico del equipo de nuestra ciudad está consiguiendo que los aficionados vuelvan al Lázaro Fernández a presenciar un partido de fútbol sala femenino, algo que no sucedía desde la época del desaparecido C.D. Drácena, que llegó a militar en la División de Honor y a punto estuvo de proclamarse campeón en un par de ocasiones.
El Torreblanca Melilla, que comenzó la competición un tanto dubitativo, en parte también debido a las lesiones y a la incorporación de varias jugadoras, que poco a poco fueron cogiendo el ritmo a la competición, muchas de ellas debutantes en categoría nacional, como los casos de Lubna y Nerea, que están siendo la auténtica revelación del equipo. Además, las jugadoras foráneas están respondiendo a lo que se esperaba de ellas, conjuntando un bloque que está siendo la sorpresa del Grupo.
El próximo sábado podrán escribir otro nuevo capítulo si derrotan o empatan en casa del líder, las jerezanas del Guadalcacín. La empresa es complicada, pero el conjunto melillense tiene calidad y sacrificio para lograrlo.
