La suerte quiso que lo que pudo haber terminado en tragedia se quedara en un gran susto y algunos daños materiales. Una grúa de construcción de unos 20 metros de altura que estaba instalada en la calle Vizcaya, en el Barrio del Real, se desplomó ayer al mediodía sobre el edificio que tenía enfrente. Todo parece indicar que un fallo técnico, sumado al viento, provocaron la caída de la grúa. No hubo que lamentar heridos, pero sí algunos daños en una de las viviendas situadas en el último piso del inmueble. Según informaron a MELILLA HOY fuentes del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios y Salvamento (SPEIS), este suceso ocurrió en torno a la una del mediodía en la calle Vizcaya. Tras recibir el aviso de que una grúa de construcción se había desplomado, dos vehículos y ocho efectivos de Bomberos se desplazaron hasta el lugar, donde cortaron el acceso a la calle y ordenaron el desalojo de las viviendas del edificio sobre el que había caído esta infraestructura para poder realizar una inspección técnica.
La grúa golpeó contra dos inmuebles, y en uno de ellos provocó varios daños en el techo que afectaron especialmente a una de las viviendas del último piso, habitado por personas mayores. En concreto, originó un agujero en el techo de la cocina y desprendimientos en el falso techo de una de las habitaciones.
Los vecinos del bloque afectado pudieron regresar a sus casas tras la retirada de la grúa, de la que se encargó una empresa privada de grúas pesadas con sus técnicos especialistas en montaje y desmontaje de estas grandes infraestructuras de construcción.
Los Bomberos sanearon algunos de los desperfectos para evitar nuevos daños y también revisaron la grúa desplomada antes de regresar al Parque sobre las tres de la tarde, después de dos horas de actuación.
Varios factores
La pregunta que ayer se hacían todos es cómo una grúa de esas dimensiones pudo acabar cayéndose de esa manera. Los Bomberos apuntan a varios factores. Uno de ellos, el viento que ayer azotaba Melilla, y otro, probablemente, un fallo técnico por el que se le pudo quedar cogido el freno, evitando que la grúa se orientara hacia la dirección del viento y quedándose perpendicular a ella, por lo que la estabilidad quedó comprometida.
Los Bomberos apuntan además que “por suerte” no hubo víctimas en este aparatoso suceso, sobre todo después de que la grúa cayera sobre viviendas habitadas.
