De «obsesión enfermiza» catalogó ayer Paz Velázquez la postura que Ciudadanos mantiene hacia su persona y el Instituto de las Culturas, al tiempo que afirmó que «es falso» que la directora gerente de la entidad vaya a cobrar 67.000 euros anuales. «Decir eso es mentir rotundamente, tal vez por desconocimiento de cómo funciona los presupuestos de la Ciudad, por torpeza política o por mala fe». Señaló que la directora gerente es el único cargo que tiene el Instituto de las Culturas, porque en su día se eliminó al personal eventual y de confianza siguiendo las directrices del Tribunal de Cuentas.
«Le pido al señor Luis Escobar (C´S) que mire los estatutos del Instituto de las Culturas, o la base de ejecución de los presupuestos o el Reglamento de Gobierno que hemos aprobado donde establece que los directores gerentes de un organismo autónomo son órganos directivos», matizó Paz Velázquez.
Presupuestos
Con respecto a los 67.000 euros, indicó que lo que se ha hecho ha sido regularizar el capítulo uno, el de personal, estableciendo «un tope máximo salarial» de este puesto de libre designación pero que no quiere decir que corresponda al sueldo de la directora gerente, que cobra en función de su categoría profesional, en este caso un A2. Detalló que la administración está obligada a hacer esta previsión económica ante cualquier situación que pueda darse.
«También la Consejería de Administraciones Públicas ha previsto los sueldos de todos los diputados de la Asamblea, pero no quiere decir que vayamos a cobrar esos sueldos, sino que tienen que tener prevista esta situación porque puede variar la situación de cualquier diputado», dijo la presidenta del Instituto de las Culturas.
Mal alumno
La también consejera de Presidencia indicó que Luis Escobar (C´S), que es profesor, se ha comportado con este tema «como un mal alumno», al tiempo que afirmó que para los diputados de Ciudadanos todo lo que tenga que ver con el Instituto de las Culturas «es motivo de polémica y da igual mentir, manipular, falsear y engañar con tal de tener un minuto de gloria en prensa y así al final de sus intervenciones pedir o mi dimisión o la eliminación del Instituto».
Entiende Paz Velázquez que los diputados de la formación morada sufren de «pactitis aguda» porque «no asumen» que ella entrara a conformar el Gobierno de la Ciudad Autónoma que «ha dado estabilidad política y social, y me culpabilizan a mí de su fracaso político». Por todo ello, Paz Velázquez pidió a Ciudadanos que «dejen de criminalizar a funcionarios de la casa, y a la directora gerente que hace una magnífica labor y no debe estar expuesta a este tipo de situaciones».
Tres sueldos y las incompatibilidades
Les pidió «más rigor y menos demagogia «, porque ella también podría seguir esta línea y afirmar que Luis Escobar «cobra tres sueldos porque es consejero de Emvismesa y cobra dietas por asistencia a plenos y comisiones».
Además indicó que es profesor de inglés de un centro escolar y también profesor asociado de la UGR en Melilla, una situación profesional, esta última, que indica la consejera que «no la tiene registrada en la Secretaría General de la Ciudad, cuando todos los diputados estamos obligados a comunicar nuestra situación profesional y cualquier actividad que realizamos». «Además espero y confío que tenga la compatibilidad para ello», apostilló.
En cuanto a Eduardo de Castro (C´S) dijo que en el último pleno se comportó «de forma insolente y deslenguado», y le indicó que «antes de criticar hay que predicar con el ejemplo», por lo que le instó a que explique públicamente qué salario recibía cuando fue nombrado «a dedo» como director del centro de reforma y si su salario se ajustaba a la categoría C por ser funcionario de prisiones o si era superior. También le animó a que explicara públicamente las razones «por las que fue despedido como personal de confianza del Gobierno de Imbroda», manifestó.
