Julio Mena Gimeno, del Comité Técnico de Valencia, será el encargado de dirigir el partido del próximo domingo, entre el Granada B y la U.D. Melilla, correspondiente a la jornada vigésimo quinta del Grupo IV de la Segunda División B. Esta será la primera vez que dirija al conjunto melillense en competición oficial y cumple su segunda temporada como árbitro de la categoría de bronce del fútbol español. Desde la campaña 2011-2012 fue árbitro asistente en Segunda B, pero su estreno como árbitro principal en esta categoría se produjo la pasada campaña, en el encuentro Barcelona B 0-0 Pobla de Mafumet.
Mena Gimeno ha estado cuatro temporadas en Tercera División y durante tres años estuvo seleccionado para el Programa de Talentos y Mentores. Mateu Lahoz fue su profesor en el curso de árbitro.
El colegiado valenciano, de 31 años de edad, jugó al fútbol hasta los 18 años y estudió Ciencias de la Actividad Física y el Deporte en la Universidad de Valencia.
En esta campaña ha arbitrado siete partidos en Segunda B, con un registro de cuatro victorias locales, un empate y dos triunfos visitantes.
Julio Mena Gimeno decidió hacerse árbitro por su amigo Miguel García Aceña, una vez decidió colgar las botas como futbolista. «Me comentó la posibilidad de dedicarme al arbitraje y un año después tomé la decisión de realizar el curso de árbitro de fútbol. Tuve suerte porque desde el principio fue algo que me gustaba mucho y conforme avanzan los años te das cuentas que se convierte en un modo de vida. Ahora, diez temporadas después, puedo compartir categoría con el amigo que en su día me ayudó a dar ese gran paso y hoy, me permite vivir este gran sueño», resalta el árbitro valenciano.
En cuanto a su referente arbitral, dijo que «no tienes que quedarte con un sólo referente, sino con lo mejor de cada uno de ellos, tanto de los compañeros de superior categoría como de los que cada día comparten partidos contigo».
«Es cierto que entre mis árbitros favoritos a nivel nacional está Mateu Lahoz, que en su día, cuando aún estaba en Segunda División, fue mi profesor en el curso de árbitro. A nivel internacional, los retirados Howard Webb y Pedro Proença, han sido de mis preferidos. Analizando el arbitraje de los tres, puedo decir que es muy distinto, pero de cada uno de ellos intento sacar aspectos que me ayuden».
Por último, resaltó que el fútbol ha experimentado muchos cambios en los últimos años, «por lo que el arbitraje debe adaptarse a estos cambios». Por ello, considera que «es necesario un aprendizaje continuo, tanto en cada partido como en cada situación que te da el arbitraje».
