Advirtió ayer el consejero de Bienestar Social que se equivoca quienes piensan que «el que más grita, insulta y presiona va a recibir más atenciones», sino todo lo contrario, por lo que aconseja abandonar esta estrategia a aquellos que la practican o «se dejan asesorar», en referencia a la familia que tras tres años acogida en un hotel sufragado por la Ciudad, ha aceptado irse al albergue mientras se determinan qué ayudas sociales pueden recibir. Indicó Ventura, en relación al caso de esta familia, que la Consejería está para ayudar de forma puntual a las personas que lo necesitan y hasta cierto punto «soportamos sus necesidades», pero atender «las necesidades reales es algo que corresponde a la propia familia, porque todos tenemos responsabilidades y lo que no podemos hacer es enquistarnos en una ayuda social».
Estrategia
Según dijo, en su momento la Consejería mantuvo contactos con una inmobiliaria para facilitar a esta familia que estaba acogida desde hacías más de dos años en un hotel para que pudiera irse a una casa de alquiler, pero cuando se les ofrecieron dos casas «hicieron todo lo posible para no irse, y se negaron porque buscan todos los recursos para presionar a la administración y lograr una casa de protección oficial». Pero aclaró que «quien más grita no tiene más razón y el que presiona no va a tener más atenciones, sino que es inversamente proporcional».
Es más, afirmó que «si gritan, insultan y presionan se encontrarán con determinados problemas». «Hay que ser educados, tanto ellos como nosotros, para solicitar lo que nos corresponda, y esas estrategias de decir delante de sus hijos que va a quemarse a lo bonzo, puede tener consecuencias». Por ese motivo animó a esta y cualquier otra familia que se vea en su situación a que «cambie de estrategia y también a quienes los asesoren, porque esas estrategias de gritar y presionar no son útiles».
La familia en cuestión ya se encuentra en el albergue donde permanecerá el tiempo que sea necesario hasta que puedan irse a una casa de alquiler. Al respecto indicó que “han conseguido en 48 horas lo que no han logrado en dos años y medio”. Ya han presentado en la Consejería presupuesto de una casa de alquiler y han solicitado las ayudas pertinentes. «Se hará un estudio social y se tomará la decisión de qué tipo de ayudar darles», apostilló.
