Se nos va otro gran amigo, es difícil asimilarlo pero así es. Y ayer en su último adiós, en la misa que tuvo lugar en la Iglesia de Santa María Micaela, la despedida fue multitudinaria. Todo eran alabanzas para una persona que lamentablemente se nos ha ido antes de tiempo, sin ver a su equipo ascender de categoría, como era su gran sueño En shock, así nos quedamos desde el pasado sábado todos quienes conocíamos a José Vicente Navarro. Muy joven, con tan solo 52 años, falleció por un cáncer maligno que ha dejado a nuestra ciudad sin uno de sus personajes más entrañables y carismáticos.
José Vicente era popular en todas sus facetas, no había nada que se le resistiera, como ese impresionante programa que dirigía, «Tarde de Coplas», en Onda Cero. Pero por si algo le conocíamos era por su pasión por la U.D. Melilla.
Cada vez que ganaba el Melilla se sentía súper feliz, pero sobre todo le dolían las derrotas. Crítico como él mismo y constructivo por encima de todo en defensa de los colores del equipo de su tierra. Así lo demostraba, tanto en las gradas como en el día a día, y especialmente los días de asamblea del club. Cómo disfrutábamos con cada una de sus intervenciones cuando se dirigía a los dirigentes para hablarles bien claro, sin tapujos y sin rodeos.
Sólo le faltó ser directivo, pero como si lo fuera. Y es que el bueno de José Vicente ayudó mucho a la U.D. Melilla, sobre todo en la etapa de Francisco Molina, cuando recaudó cerca de un millón de las antiguas pesetas en concepto de abonos. Era muy querido y por tanto imposible darle un no como respuesta cuando intentaba vender el abono para conseguir que su equipo no pasase calamidades en lo económico.
Se nos va otro gran amigo, es difícil asimilarlo pero así es. Y ayer en su último adiós, en la misa que tuvo lugar en la Iglesias de Santa María Micaela, la despedida fue multitudinaria. Todo eran alabanzas para una persona que lamentablemente se nos ha ido antes de tiempo, sin ver a su equipo ascender de categoría, como era su gran sueño. Al final de la ceremonia, José Vicente fue despedido, a petición del párroco, con un gran aplauso, como bien se merecía, en lo que fue un momento bastante especial y emotivo.
Desde la Redacción al completo de MELILLA HOY lo vamos a echar mucho de menos. Cuántas tertulias deportivas nos dedicaba cada vez que nos visitaba y todas aquellas vivencias como gran seguidor de la U.D. Melilla. También nos mostraba su gran pasión por los medios de comunicación, y es que su gran ilusión era montar una radio deportiva.
El fútbol local y concretamente la U.D. Melilla están de luto. El club de sus amores así debe reconocerlo y no dudamos en que lo hará. La pena es que no haya podido ser en vida, pero en el próximo encuentro de Liga su memoria debe estar más presente que nunca en el Estadio Municipal Álvarez Claro.
Desde aquí, enviarle un fuerte abrazo a todos sus familiares. Fuerza en estos duros momentos. Hasta siempre amigacho, como siempre acostumbrabas hacer cuando iniciabas una conversación con la persona a la que apreciabas, y cuida, ahora desde ahí arriba, como siempre has hecho por tu U.D. Melilla.
