Los de Juanjo Garcés solo habían perdido con anterioridad en casa frente al líder de la competición, El Ejido 2012, encajando, por tanto, frente a los torremolinenses su segunda derrota de la presente temporada. De todos modos, lo peor es que los merengues continuarán en posiciones de descenso, a falta de siete jornadas para la conclusión. La Peña Real Madrid sucumbió ayer ante el Torremolinos F.S. por el resultado de 2-3, en un partido en el que los melillenses desaprovecharon una ventaja de dos goles adquirida en la primera mitad. Los malagueños demostraron ser un gran rival y fueron capaces de darle la vuelta al marcador, adjudicándose finalmente el triunfo, pese a los intentos por parte de los locales por igualar el electrónico.
Los peñistas solo habían perdido con anterioridad en casa frente al líder de la competición, El Ejido 2012, encajando, por tanto, frente a los torremolinenses su segunda derrota de la presente temporada. De todos modos, lo peor es que los merengues continuarán en posiciones de descenso, a falta de siete jornadas para la conclusión.
En el duelo de ayer, los de Juanjo Garcés salieron muy enchufados y dispuestos a marcar lo antes posible, algo que consiguieron, en el 3’, por mediación de Ferni. El propio futbolista, unos minutos más tarde, sería el autor del 2-0. Los costasoleños no arrojaron la toalla y fueron metiéndose, poco a poco, en la contienda, más aún tras reducir las distancias Fernando en el 14’. Este gol envalentó al Torremolinos, que consiguió marcharse al intermedio con el encuentro empatado (2-2), aunque como consecuencia de una acción de auténtica mala fortuna de los melillenses, ya que un disparo de un jugador del Torremolinos rebotó en Ale Ramos y el balón acabó en el fondo de las mallas.
En la reanudación, el partido se desarrolló con mucha igualdad, mostrando más eficacia de cara al marco contrario los futbolistas malagueños, quienes se adelantaron en el luminoso, antes de llegarse al ecuador de esta segunda mitad, con un tanto obra de Óscar.
Los peñistas lo intentaron hasta el último segundo, gozando de oportunidades muy claras para empatar, incluidas un tiro libre indirecto dentro del área y un doble penalti para, al menos, salvar un punto, pero unas veces las buenas intervenciones del cancerbero torremolinense y otras la falta de acierto lo impidieron.
