Un hombre podría pasar un año de prisión por intentar robar presuntamente en el interior de una iglesia evangélica. La Policía Nacional sostiene que le encontró en el interior y que habría accedido a ella reventando una puerta. Asimismo, asegura que le localizaron varias herramientas cuando le cachearon, así como que llevaba “bolsas preparadas” para cometer un robo. La defensa, sin embargo, sostiene que el acusado únicamente buscaba un lugar en el que dormir. El Ministerio Fiscal reclama la pena de un año de prisión para un individuo, al que se acusa de ser el presunto autor de un delito de robo con fuerza en las cosas. Pese a que el procesado no se presentó a la vista, esta pudo celebrarse en su ausencia, ya que la pena solicitada por la Fiscalía es inferior a dos años de cárcel.
La única persona que prestó declaración fue un agente de la Policía Nacional que intervino la noche de los hechos. Según apuntó, él y sus compañeros acudieron hasta una iglesia evangélica situada en la plaza Aviación Española, tras recibir el aviso de que había saltado la alarma. Sin embargo, en un principio no encontraron indicios de actividad delictiva.
«Todo estaba bien cerrado y en orden», expuso. Según dijo, aquella noche hacía mucho viento, por lo que pensaron que ese podría ser el motivo de que hubiera sonado la alarma.
Ruidos de la puerta trasera
No obstante, posteriormente volvió a activarse. Nuevamente, se dirigieron hacia la iglesia. Fue entonces cuando escucharon ruidos que procedían de la puerta trasera. Allí localizaron al procesado, siempre según su versión de los hechos.
El agente de la Policía Nacional sostuvo que el hombre había reventado una puerta para acceder al interior de la iglesia. Asimismo, puso de manifiesto que él y sus compañeros le encontraron varias herramientas cuando procedieron a cachearlo. Por otro lado, afirmó que el hombre “tenía bolsas preparadas” para cometer un robo.
Un lugar para dormir
Aunque el acusado no se presentó a la vista, pese a haber sido correctamente citado, su letrado solicitó la sentencia absolutoria de su patrocinado. Según defendió, el hombre no pretendía cometer robo alguno. Lo único que quería era encontrar un lugar para dormir esa noche, afirmó el abogado.
De ser condenado por la magistrada titular del Juzgado de lo Penal número 2, el hombre tendría que cumplir la pena de prisión de un año y pagar 120 euros en concepto de responsabilidad civil.
Ahora solo queda por conocer la sentencia de la juez: condenatoria o absolutoria.
