«El entrenador catalán, Borja Comenge, utiliza a diez jugadores, con lo cual, y sin disponer de la mejor plantilla del campeonato ni mucho menos, cuenta con mimbres a la hora de
las rotaciones”. «Las comparaciones dicen que son odiosas y, aunque el nivel entre ambas plantillas sea abismal, no podemos caer en la trampa de Cáceres y el equipo melillense debe salir concentrado” Nueva jornada para el Melilla Baloncesto, en la que esta vez le toca visitar tierras catalanas, exactamente Lleida, para enfrentarse al equipo que entrena Borja Comenge. Un conjunto que, bajo mi punto de vista, carece de regularidad y no sabemos realmente qué nos encontraremos en el ‘Barris Nord’. Lleida es capaz de competir en casa contra rivales como Burgos y Palencia, pero también es capaz de perder en casa y de forma abultada frente a Clavijo.
El técnico catalán utiliza a diez jugadores, con lo cual, y sin disponer de la mejor plantilla del campeonato ni mucho menos, cuenta con mimbres a la hora de las rotaciones. Siendo su hombre estrella el escolta Garrett Nevels, posee jugadores que saben lo que es la categoría, como los casos de Alzamora, Simeón, Sutina, Sevillano y, por supuesto, Feliu. Los ilerdenses cuentan con cuatro rotaciones en el juego interior muy correctas, pero no para estar arriba y competir con escuadras del nivel de Melilla, Palencia, Burgos, Breogán y Oviedo, que en la ‘pintura’ tienen lo mejor que hay ahora mismo en el mercado.
Sí es cierto que los catalanes plantean situaciones tácticas para jugar con Feliu en el poste bajo, aunque nosotros tenemos la respuesta, Pablo Almazán, y viven prácticamente de su juego exterior, en el que promedian cerca de 50 puntos por partido, con un Garrett con mucho talento, y desde las situaciones de bloqueo directo marcan las diferencias, sobre todo cuando entran en racha y con el apoyo de su público, unos aficionados muy ‘calientes’.
Los hombres de ‘pintura’ que pueden causar algún que otro problema son Mbaye, de espaldas al aro, y el veterano Alzamora, su primera rotación. A ellos se une Leonardo Demetrio jugando al 4 abierto y que está cuajando una buena temporada, al que suplirá el joven Martí.
Las comparaciones dicen que son odiosas y, aunque el potencial entre ambas plantillas sea abismal, no podemos caer en la trampa de Cáceres. El equipo melillense debe salir concentrado desde el inicio y jugar al nivel que contra Palencia, insistiendo en nuestra referencia que es Arteaga, y a partir de ahí leer las situaciones de ventajas que puedan surgir dependiente de la pizarra de Comenge.
Las claves para ganar al Actel Força Lleida será no dejarles jugar rápido a sus jugadores, parar las situaciones con el balón en mano de Garrett y las acciones en poste bajo del alero Feliu. Las rachas anotadoras del equipo catalán estarán presentes, y ese es un aspecto en el que los de Alejandro Alcoba deberán estar con la cabeza fría y saber gestionarlas.
