El consejero de Seguridad Ciudadana, Isidoro González, aseguró ayer que el Gobierno melillense y la Policía Local trabajan en el objetivo de evitar que en nuestra ciudad haya accidentes de tráfico. Para intentar conseguirlo, anunció una serie de actuaciones que se van a poner en marcha, entre ellas la instalación de cuatro radares fijos en diferentes puntos de la red básica de Melilla, así como de un “multacar”, que es una cámara que se instala en un coche patrulla para captar a los vehículos que infringen las normas. González señaló además que el grupo de Atestados de la Policía Local está elaborando un estudio pormenorizado sobre los puntos de siniestralidad, que será analizado por las consejerías de Seguridad Ciudadana y Medio Ambiente para tomar medidas inmediatas que lleven a una mejora de la Seguridad Vial. También se está mejorando el Plan de Movilidad que logrará una “drástica reducción” de la siniestralidad.
A ello se une la capacidad sancionadora de la Policía Local, que el año pasado tramitó una media de mil multas mensuales y en 2017 esas cifras se están multiplicando. El consejero de Seguridad Ciudadana se mostró convencido de que todas estas medidas conseguirán hacer de Melilla una ciudad “más segura y pacífica”.
“Politizar un accidente es carroñero”
González anunció estas medidas durante el Pleno de Control, en el que afeó al PSOE que hiciera “política de un accidente”, en alusión al atropello mortal que sufrió el melillense Carlos Huelin el 5 de marzo, causado por un conductor que septuplicó la tasa máxima de alcoholemia permitida. Para el consejero, lo que hicieron los socialistas es “carroñero”.
González admitió que no esperaba que el PSOE “sacara” este accidente en el debate, y lamentó que “parece que vale todo” con tal de “hacer política”, si bien respondió al PSOE que de aquel accidente “solo es responsable una persona”, que fue detenida y puesta a disposición judicial.
El consejero reaccionó así después de que la diputada socialista Lamia Mohamed Kaddur reprochara al Gobierno que por la ciudad “no se puede caminar o ir en bici” sin que sean una “actividad de alto riesgo”, debido a la “violencia vial” que existe.
En este sentido, recordó que en la marcha que hubo el 11 de marzo en recuerdo a Carlos Huelin, unos 3.000 melillenses pidieron que se acabe con esa “violencia vial”. “No hay oportunismo en pedir que quienes nos gobiernan velen por la seguridad en la ciudad”, dijo la diputada.
