Mucha gente piensa que con la llegada de Susana Díaz, el PSOE se unirá definitivamente, y las cosas seguirán como siempre. Desde mi punto de vista, el PSOE oficial, el de ahora, ha olvidado tanto el contexto en el que vive como la situación interna de su propio partido… O por lo menos, aunque la conozca, desea no conocerla.
La hipotética guerra por el poder, los barones, los típicos dinosaurios socialistas que avalan a unos y a otros, ya forman parte de la vieja política. Creo que quienes los sigan creerán que mantendrán con vida al partido porque ellos tienen las llaves de la solución, pero para mí está claro que esto dejó de ser así desde que la ciudadanía dejó de tener conexión real con la clase política en su conjunto.
Ahora, a Sánchez, desmarcarse de PODEMOS no le interesa, ni tan siquiera le es pertinente. Sánchez se ha dado cuenta y sabe que las grandes celebraciones de márquetin y boato ya en una población tan castigada, han dejado de significar nada.
A Sánchez le interesa más la creación de un nuevo partido laborista donde marque el rumbo de su propio partido y de la clase trabajadora sin interferencias; el odio de Susana Díaz a PODEMOS es irreconciliable… lo demás son excusas.
Pienso que el PSOE es un partido demasiado antiguo como para asumir nuevos retos de izquierdas y Sánchez lo sabe. Su única oportunidad es perder las primarias con el PSOE, ya que si gana, no le van a dejar actuar dentro de esta institución centenaria, y crear una nueva formación de izquierdas, que unida a PODEMOS y a Izquierda Unida, se pueda presentar en coalición a futuros retos electorales para desbancar a la Derecha… No hay más.
El PSOE, a mi modo de parecer, ha dejado de tener vigencia ante las exigencias de la población de izquierdas de hoy en día en España. ¡Es más! Me atrevería a decir que la mayor parte de los votantes socialistas piensan que no saben muy bien lo que votan.
Ni que decir tiene, que con la llegada de Felipe González se hicieron cosas necesarias y que le dieron un impulso de progreso a la sociedad española en tiempo de la nueva democracia, ya que después del Franquismo, a nivel social, estaba todo por hacer. Sin embargo, todo con el paso de los años, se queda solo en las esencias.
Ganar este congreso a Sánchez creo que no le conviene, ya que quedaría mutilado como antes. Esto yo lo veo como su protocolo victimista de quien desea que el socialismo en España implique una nueva realidad…Pienso que un nuevo partido que forme un triunvirato de izquierdas para los futuros comicios está cerca… El tiempo lo dirá.
