La abogada de la denunciante, Elisabeth Guerrero, la abogada confía en que esta sentencia ayude también a esclarecer el procedimiento judicial paralelo por presuntos abusos a la hija biológica que tenían entre ambos dado que "sienta un precedente" y es un "indicio" de que su hermana podría haber sufrido abusos y se debe tomar en cuenta por el órgano que juzgue el caso. Y es que la "pederastia" es un "trastorno" que se puede reiterar y es el motivo por el que pidió como pena accesoria el programa sobre educación sexual para el ya militar condenado.
La abogada de la denunciante, Elisabeth Guerrero, aseguró sentirse "muy satisfecha" con la sentencia por lo que no la recurrirá y es que si bien la pena es menor a la que reclamaba – 18 años de prisión y 9 meses menos un día frente a 13 años y medio- ha sido por ajustarse a la última reforma del Código Penal, pero dentro de ésta el juez ha optado por la máxima.
Aún así, lo más importante para la madre y la menor ha sido la prohibición de acercamiento y comunicación con la pequeña dado que aporta mayor seguridad a la familia. Guerrero recalcó, que tal y como recoge la resolución de la Audiencia Provincial, el testigo de la menor ha sido fundamental y es que entre otras cuestiones, los gestos que hacía la pequeña no podían ser reproducidos de terceros lo que aporta mayor credibilidad al testimonio.
Además, precisamente fue un tercer testigo, familiar de una amiga de la víctima, el que da aviso a la madre y ésta antes de denunciar la lleva a un psiquiatra quien avala que la niña presenta síntomas compatibles con haber sufrido abusos. Todas estas pruebas, que también ha tenido en cuenta el Tribunal, tumba la versión de la defensa y el acusado de que era una 'vendetta' de la madre.
Por otro lado, la abogada confía en que esta sentencia ayude también a esclarecer el procedimiento judicial paralelo por presuntos abusos a la hija biológica que tenían entre ambos dado que "sienta un precedente" y es un "indicio" de que su hermana podría haber sufrido abusos y se debe tomar en cuenta por el órgano que juzgue el caso. Y es que la "pederastia" es un "trastorno" que se puede reiterar y es el motivo por el que pidió como pena accesoria el programa sobre educación sexual para el ya militar condenado.
