Con unos entremeses, una pinchitada y una sardinada, unos 110 socios de la Asociación de Vecinos Rusadir celebraron una comida en la sede de la entidad vecinal situada al lado del antiguo Mercado Central. El objetivo, según explicaba el presidente de la asociación de vecinos, Francisco Veira, es mantener una tradición que se lleva celebrando desde el origen de la entidad, que es el Día de la Madre. Con unos entremeses, una pinchitada y una sardinada, unos 110 socios de la Asociación de Vecinos Rusadir celebraron una comida en la sede de la entidad vecinal situada al lado del antiguo Mercado Central.
El objetivo, según explicaba el presidente de la asociación de vecinos, Francisco Veira, es mantener una tradición que se lleva celebrando desde el origen de la entidad, que es el Día de la Madre.
Veira explica que se trata de un día que desde hace años se lleva celebrando en la asociación después del Día de las Cruces de Mayo en el que se realiza una comida en hermandad entre los vecinos.
En la tarde de ayer, después de unos deliciosos dulces, cada una de las mujeres asistentes al fraternal ágape recibió un clavel rojo como regalo.
Entre los presentes a la comida de la asociación vecinal con 240 socios, estuvieron en representación de la Ciudad, el viceconsejero de Festejos, Francisco Díaz y la viceconsejera de Integración Cultural, Nassera Al-Lal Mohamed.