La etapa más dura de todas las ediciones del Merzouga Rally Dakar Series provocó un importante vuelco en la clasificación general, viéndose afectada la escudería melillense Delfi Sport Aventura, cuyo piloto, Juan Miguel Fidel tiene ahora muy difícil toda opción al liderato en la presente edición. La cuarta jornada del Merzouga Rally 2017 se planteaba dura por las condiciones meteorológicas, ya que no remitió la tormenta y amenazó con golpear más fuerte que los días anteriores.
Y así fue, Juan Miguel Fidel y su copiloto Isidro Cuadrado salieron los primeros, abriendo pista, con una estrategia bastante clara y estudiada, tratando de conservar la mecánica todo lo posible ya que se trataba de la etapa maratón, sin asistencia.
Las zonas montañosas, con pistas muy rotas y mucha hierba de camello, hicieron sufrir a todos los participantes, como lo demuestra que a los 100 kilómetros ya se encontraban muchos vehículos parados por averías en la pista, dándole al equipo melillense Delfi Sport más opciones de luchar por el liderato. A 20 kilómetros del refulling, una ‘pared de piedra’, muy inclinada y de paso obligatorio, provocó el vuelco de tres buggies por la dificultad de la subida. Juan Miguel Fidel forzó el embrague subiendo, teniendo que reparar el vehíuclo in situ, con la mala suerte que la tormenta de arena volvió a aparecer con más fuerza que en días anteriores. Entonces, la organización de la carrera decidió nuevamente paralizar la etapa por seguridad, al no poder despegar el helicóptero. La penalización fue inevitable para el equipo de nuestra ciudad por la imposibilidad de cambiar el embrague, teniendo que llegar remolcado a la asistencia.
