La representante de la Gestora del PSOE local, Sabrina Moh, ha pedido al Ministerio de Fomento que busque las fórmulas para que la línea con Motril sea incluida en el contrato marítimo entre Melilla y la península. "Los melillenses queremos que, por encima de cuestiones puntuales que puedan producirse, los destinos a Málaga, Almería y Motril estén garantizados y, por ello, le pedimos al Gobierno de España que tome cartas en el asunto". La dirigente socialista recordó que la Diputación Provincial de Granada y los ayuntamientos de Granada y Motril han mostrado su apoyo para que esta línea marítima sea considerada de interés público y pueda optar a las ayudas correspondientes en condiciones de igualdad con Málaga y Almería.
Según los datos oficiales, la línea marítima que une Motril con Melilla cerró el año 2015 con 304.112 pasajeros, una cifra superior a la de Almería, con 278.669 pasajeros, y a la de Málaga, que registró 261.832 pasajeros. "Los datos demuestran que a los melillenses la línea con el puerto motrileño nos gusta y queremos que se consolide y se mantenga", argumentó Sabrina Moh.
"Al PP durante años se le llenó la boca diciendo que las autopistas de Melilla eran el mar y el aire, y ahora que está en el Gobierno de la Nación y puede demostrarlo con hechos, recibimos un 'no' a la propuesta de estudiar incluir la línea de Motril", expuso la socialista.
Oferta de cero euros
La representante de la Gestora del PSOE local también se refirió a la valoración, aparecida en la prensa local, que ha hecho el Observatorio de Contratación Pública sobre la oferta de cero euros que ha hecho la naviera Trasmediterránea por el contrato marítimo. Según el PSOE, dicho organismo ha señalado que la oferta de la naviera es "anormal" y debería ser excluida del concurso.
"La ciudadanía melillense nos merecemos unos barcos modernos, rápidos y dotados de un gran servicio de calidad -argumentó Moh-. Por ello nos opusimos a una oferta de cero euros porque implica que la compañía va a poner barcos totalmente pagados y rentabilizados. O dicho de otra forma, que en vez de poner barcos nuevos y modernos, lo previsible es que se pongan barcos viejos".
Algo, agregó, que el nuevo contrato marítimo que ha hecho el Gobierno del PP permite porque, en el contrato de hace tres años la edad máxima era de 15 años, pero, en el nuevo pliego, se eleva hasta 20 años la edad que pueden tener los barcos. "Las navieras que tengan barcos más viejos pueden licitar por un precio más bajo o incluso sin pedir dinero, mientras que las navieras que presenten sus barcos más nuevos y modernos, les va a salir más caro por lo que no van a poder competir contra esa oferta", aseguró.
