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El comercio del centro de Melilla lanza un grito de SOS tras el cierre de 35 establecimientos

Por diversos motivos, solo en los dos últimos años se han registrado la desaparición de 35 comercios desde la C/ Marina a C/ López Moreno y C/ Ejército Español

El comercio de Melilla está en la "Unidad de Cuidad Intensivos" (UCI), en palabras del presidente de la Asociación de Comerciantes de Melilla (ACOME), Enrique Alcoba. El responsable de esta entidad, en la que lleva veinte años, asegura que se ha tocado fondo y reclama de las autoridades, tanto Ciudad Autónoma como Delegación del Gobierno, medidas para que finalmente el sector no muera. Todo ello después de que en solo dos años se hayan producido el cierre de 35 establecimientos comerciales en el centro de la ciudad. "No viene el turismo real, que es el marroquí, porque la frontera es un tapón" admite Alcoba, motivo por el que ha vuelto poner sobre el tapete una reivindicación histórica: que el puesto de Beni-Enzar sea únicamente para turistas. Enrique Alcoba ha señalado que quién vuelva a Melilla después de veinte años sin duda la verá más bonita y con mejores transportes, sobre todo marítimo. "Pero si nos ceñimos a la parte económica y comercial, después de veinte años teniendo el honor de presidir altruistamente la asociación de comerciantes de Melilla (fundada en 1978), aquí veremos que es otra ciudad totalmente diferente y no para bien" ha asegurado. Por ello ha querido hacer uso de un ejemplo médico y ha señalado que el comercio de Melilla ha tocado fondo y haciendo un símil sanitario está en la UCI".

Así, sólo en los dos últimos años, únicamente en el centro -entre la C/ General Marina y c/ Ejército Español- hay 35 locales cerrados, al margen del cierre del Banco de España, el edificio de Correos y hasta la Cámara de Comercio hace poco. "Nunca hemos vivido antes una situación igual" ha admitido.

Alcoba ha recordado que durante muchos años han solicitado al gobierno de la ciudad crear un órgano llamado Consejo Económico y Social o similar para trabajar todos juntos sobre el futuro económico de Melilla en los próximos cinco-diez años y saber qué quieren para esta ciudad y a dónde van, pero ha lamentado que "no lo han estimado conveniente".

El responsable de los comerciantes ha apuntado que en los últimos cinco años han pedido en diferentes ocasiones poner unos cien aparcamientos de rotación en el centro (Máximo 2 horas) para facilitar las compras. "No se llevó a cabo, sin embargo, se van a poner 1.300 plazas gratis para el Centro Comercial" ha contrapuesto.

El problema de la frontera
Enrique Alcoba ha indicado que llevan unos diez años solicitando una frontera segura y fluida y que Beni Enzar sea para el paso de turistas y separar el comercio atípico a otra frontera existente o nueva. "A día de hoy la frontera ni es segura por la cantidad de inmigrantes (40% del total de entrada en toda España) y de menores (500-700) que tenemos en la ciudad, ni fluida por las largas colas y tiempo de espera" ha denunciado.

En este punto, ha hecho la siguiente reflexión: "Al final pensamos como muchos ciudadanos que los políticos están "en lo suyo" próxima elecciones, votos, poder, cargos, etc.".

Otras claves
Para Alcoba son muchos los factores negativos que nos han llevado a esta situación de comercios cerrados
Así, ha detallado que antiguamente Melilla contaba con dos barcos, A. Lázaro y V. Puchol, que venían a Melilla desde Málaga y Almería "con muchísimos turistas peninsulares a comprar en nuestros comercios y consumir en nuestros bares. En cambio ahora tenemos tres compañías y varios barcos, en los que el 90% de los turistas son de ida y vuelta de melillenses en fines de semana, puentes, semana santa, etc…que aprovechan para hacer sus compras fuera de la ciudad".

Asimismo, ha añadido que cuando estaba el servicio militar Melilla contaba con unas 10.000 personas entre tropas y mandos consumiendo todos los días, usando taxis, COA, bares, comercios… y cada tres meses había una jura de bandera y visitaba la ciudad muchas familias utilizando agencias de viajes, hoteles.etc. De igual modo, ha recordado que venían a diario familias enteras de Marruecos a consumir a Melilla "sin sufrir colas"
Por otro lado, ha apuntado que Melilla recibe semanalmente unos mil paquetes de particulares por correos y agencias de compras por Internet, que están exentos de IPSI si no llega a los 100 euros. Sin embargo, ha criticado que "los comerciantes pagamos el IPSI hasta en las bolsas que regalamos".

Faltan clientes e iniciativas
Para Alcoba, en definitiva, "lo que falta en Melilla son clientes y políticas de ayudas y apoyo al comercio local. Y haber buscado otras alternativas como crear un centro de instrucción, un Campus Universitario, o potenciar el turismo en Málaga y Almería a través de las casas de Melilla…"
En cambio ha lamentado que "ante esta situación que vivimos la alternativa que nos da el gobierno son más calles peatonales -pero vacías de clientes- y un centro comercial en la frontera".

Al mismo tiempo ha admitido que "ya nos gustaría a los comercios locales tener la facilidad con las han llegado a tener las licencias de obra con las diferentes recalificaciones de los terrenos de Valenzuela, de industrial, a comercial, y a más comercial". "Un traje a medida para la empresa" ha criticado. A estas circunstancias, Alcoba ha sumado la extinción de los contratos de arrendamientos en la llamada "Ley Boyer' del 31 de Diciembre del pasado 2014.

Un arquitecto bajo sospechas
El presidente de ACOME ha subrayado que si todo esto era poco, "debemos de tener en consideración el hecho de que en Fomento un arquitecto, no funcionario y habiendo sido contratado con alguna denuncia por medio y sin experiencia de haber rehabilitado ningún edificio, declare ruina económica a edificios protegidos de patrimonio históricos como es todo el centro de la ciudad, favoreciendo la especulación de algún propietario que prefiere abandonarlo para provocar la ruina económica con el consiguiente cierre de los comercios y más paro". Alcoba ha indicado que la obligación de la administración es "proteger y obligar a mantener los edificios e intentar la rehabilitación antes de derribados".

¿Ciudad de funcionarios y planes de empleo?
En definitiva en esta ciudad ve que "cada vez hay más empresas cerradas, mayor paro, comercios de dudosa legalidad, aumento de taxis piratas, más vendedores ilegales y por tanto más competencia desleal". Ha advertido que "si seguimos así, en mi modesta opinión Melilla se convertirá en una ciudad subsidiada con solo funcionarios y con trabajos de planes de empleo"
El dirigente de los comerciantes ha concluido apuntando que "sin duda, para haber llegado a esta situación, todos tenemos algo de responsabilidad pero pienso que quien nos gobierna y cobran un sueldo por ello son los que deberían de trabajar y buscar alternativas para ofrecer a los jóvenes un futuro económico y comercial para Melilla"

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Mustafa Hamed

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