La secretaria de Comunicación del Partido Popular de Melilla, Cristina Rivas, ha mostrado este sábado su convencimiento acerca del estancamiento de la Asociación Ecologista Guelaya, "de ahí que no sean capaces de darse cuenta que los tiempos han cambiado mucho". Es más, Para Rivas, este estancamiento de los ecologistas, "con esa particular versión cicatera de las cosas que tienen, hubiese impedido que Melilla contase hoy con algunos de los puertos que tiene", añadiendo a este respecto que"eso hubiese sucedido, en el caso de haber existido esa asociación a principios del siglo XX". La dirigente del Partido Popular, ha mostrado su sorpresa ante el hecho de que los ecologistas se nieguen a que empresas como ENDESA y REMESA no salgan del espacio urbano, “a pesar de las emisiones al aire y los ruidos que provocan”.
A diferencia de estos ecologistas, lo que pretende el Partido Popular, en opinión de Rivas, “es llevar estas industrias a los terrenos de la ampliación del Puerto para liberar espacios”.
Liberar espacios públicos
La secretaria de Comunicación del Partido Popular, Cristina Rivas, ha rechazado de plano “que se nos pretenda acusar de ninguna clase de pelotazo urbanístico”, y para ello, ha recordado que “los que se liberarían serían espacios públicos de la Autoridad Portuaria de Melilla y de la Ciudad Autónoma”, de ahí que considerase “un grave insulto, que podría llegar incluso a los tribunales”.
Lo que debería hacer Guelaya, en opinión de Rivas “es decir cuál es el pelotazo urbanístico del que están hablando”. Para Rivas, Guelaya confunde una explicación de una postura sobre la ampliación del Puerto, con un insulto, algo que dijo “jamás se ha proferido desde el Partido Popular de Melilla”.
“Lo que decimos –añadió Rivas- es que la patella ferruginea, no puede ser más importante que la vida y el trabajo de muchas familias”.
Proyecto de Río de Oro
La secretaria de Comunicación del Partido Popular cree que Guelaya confunde las cosas, “las confunde cuando dice que ponemos palos en las ruedas de la renaturalización del Río de Oro”. Es más, para Rivas, “esto no es más que poner el parche antes de que salga el grano”, y es que la dirigente popular ha asegurado que “es imposible poner palos en la rueda a un proyecto que ni tan siquiera conoce el Gobierno de la Ciudad, entre otras muchas cosas, porque nunca nos lo han presentado”.
Rivas sostiene que “lo que Guelaya pretende es que un río, por lo general seco, lleve agua”. De ahí que se preguntase “qué cantidad”. “¿Permanentemente, sólo unas horas, algunos días a la semana?. No sabemos nada”, recordando a su vez que “a día de hoy, el agua es un bien escaso en Melilla”.
Cauce artificial
Rivas ha querido recordarle a Guelaya que “desde el Instituto Leopoldo Queipo hasta el mar, el cauce de ese río es artificial. Antes pasaba por el Parque Hernández y desde siempre se le conoce como está ahora, pasando por una zona urbana”.
Por tanto, “si piden juncos y demás flora propia, provocaría la presencia de insectos, serpientes, ratas, etc y como comprenderán los señores de Guelaya, eso no se puede permitir al lado de viviendas”.
Por último, Cristina Rivas insistió en que desde el Gobierno de la Ciudad “no sabemos que renaturalización del Río de Oro están planteando desde Guelaya”, de ahí que pidiese a los ecologistas que se lo explicasen, “para que podamos valorar las cosas, aunque a priori, por lo poco que conocemos, este plan se revela como poco interesante para la Ciudad”.
