La cepemista Dunia Almansouri afirma que su grupo apoya totalmente la huelga convocada por Acsemel para protestar por las restricciones al comercio fronterizo. Según incide, es necesario que se busquen soluciones para que no se destruya «la única fuente de riqueza de la ciudad». Por este motivo, la diputada de CPM reclama al Gobierno que deje de «maltratar» la frontera y tenga en cuenta todos los puestos de trabajo que genera en Melilla. Coalición por Melilla pide soluciones consensuadas para garantizar el tránsito en la frontera. Lo que no admite es la última medida adoptada por la Delegación del Gobierno por la que se restringe el horario comercial en el paso de Beni Enzar. Por este motivo, afirmó ayer la diputada Dunia Almansouri que su formación sí respalda la huelga que hoy comienzan los trabajadores fronterizos de Melilla y que ha sido convocada por Acsemel.
Según subrayó la dirigente cepemista, el Gobierno tendría que tener en cuenta que la frontera genera muchos puestos de trabajo en Melilla. En este punto, incidió en que las restricciones en las fronteras ya han hecho que los turistas comerciales que venían de Marruecos hayan dejado de venir a la ciudad. «Ahora queremos echar también a los mayoristas que compran mercancía en tránsito para pasarla al otro lado de la frontera», criticó Almansouri.
Llamar a ‘papá Estado’
Al parecer de la diputada, el Gobierno de Melilla tiene la esperanza de que el Estado recompense el dinero que deje de recaudarse con estas restricciones. «Piensa que llamaremos a papá Estado y nos aportarán los millones que falten», declaró. «Yo creo que el Gobierno está jugando a la ambigüedad. El de la Ciudad es consciente de cuáles son las soluciones y de que las fronteras son primordiales para la economía de Melilla. Pero como quien gobierna es su partido a nivel nacional, no puede llevarle la contraria», expuso la cepemista.
«Lo que no es de recibo es que, con los ingresos que genera la frontera a la ciudad de Melilla, se la esté descuidando y se la esté maltratando de esta forma», censuró Almansouri. Máxime cuando, como apuntó, Melilla carece de tejido productivo y modelo económico. «No nos la podemos cargar como única fuente de riqueza que es», subrayó la dirigente.
La ausencia del delegado
Por su parte, Almansouri apuntó que el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, se encuentra «ausente» y es al presidente de Melilla, Juan José Imbroda, a quien hay que dirigirse para tratar los temas de frontera. En este punto, insistió en que su formación estaba dispuesta a sentarse con miembros del Gobierno, con otros partidos y asociaciones para «tender una mano» en la búsqueda de soluciones definitivas.
Como indicó la diputada, CPM aboga por adaptar y especializar las fronteras. «El pasado fin de semana Imbroda ya nos daba la razón en cuanto a la necesidad de una frontera comercial y exclusiva para el tránsito de mercancías», señaló al respecto. Por otro lado, la formación apuesta por garantizar la permeabilidad de los pasos sin descuidar la seguridad. «No podemos permitir que a través del comercio atípico esté pasando todo tipo de mercancías sin que sepamos qué hay en esos bultos», agregó. «La seguridad no está 100% garantizada», lamentó Almansouri.
Asimismo, la cepemista recordó su propuesta de reclamar más inversiones para mejorar las infraestructuras y aumentar las plantillas, así como de mejorar las condiciones de salubridad en las que trabajan los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado en los pasos.
No se olvidó tampoco de mencionar lo vital de que Melilla cuente con un quinto paso fronterizo. «En mayo de 2013 Imbroda anunciaba la apertura de este quinto puesto fronterizo como una solución importante para el tráfico fluido de los puestos y para que Beni Enzar sea considerado el paso internacional que debe ser para el paso de turistas», resaltó la diputada.
