Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

El Mercado Renacentista de Carlos V, catorce años conquistando a Melilla

Melilla se vuelca cada año con el mercado

Con un pasacalles por la Avenida, con zancudos, ocas, malabarista, soldados y danzarinas se inauguraba ayer la edición número catorce del antiguo Mercado Medieval de Melilla reconvertido en el mercado Renacentista del Emperador Carlos V. En cualquier caso el Mercado ha vuelto y aquellos que se acerquen a visitarlo sentirán que han viajado al pasado, y es que las calles de Melilla la Vieja parece haber vuelto a aquellos convulsos años de descubrimientos y conquistas. En concreto, desde la Plaza de los Aljibes a la de Armas, pasando por la de las Culturas y el Foso del Hornabeque, acogen hasta cien puestos de variado contenido, como los de dulces y embutidos, o los de artesanía, los de adivinación o escritura en árabe, además de mesones para degustar sabrosos manjares y talleres variados. Todos estos atractivos se completan con músicos y acróbatas. La diversión está servida.

Acróbatas, bufones, malabaristas, cetreros, cortesanos y músicos, militares, danzarinas del vientre y hasta criadores de ocas se dieron cita en la comitiva de bienvenida al Mercado Renacentista desfilando, para disfrute de los melillenses, por plena Avenida, conduciéndoles hasta la Plaza de las Culturas donde presenciar la proyección del videomapping colorista y musical que se proyectó sobre los muros del Foso del Hornabeque.

Acto seguido, el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, acompañado por el delegado del Gobierno, Abdelmalik el Barkani y la presidenta de la Fundación Ciudad Monumental, Maribel Pintos, cortaba la cinta de acceso al interior del mercado a través del túnel del Foso del Hornabeque. Ya en el interior, los melillenses se trasportan en el tiempo para descubrir una Melilla que respira historia en un mercado que se prolongará hasta el domingo. El horario será de siete de la tarde a dos de la madrugada.

Mercado
Una vez en el interior, los visitantes descubren una aldea medieval en fiestas, con su suelo cubierto de paja, envuelta en una nube de mil olores, con decenas de puestos de venta de todo tipo, desde los de orfebrería, a los atestados tenderetes de alimentación donde adquirir una hogaza de pan artesanal o un queso curado, los puestos de dulces, o la zona de juegos infantiles. Un grupo de zancudos con un terrorífico diablo a la cabeza, o los músicos bereberes, contribuyen con su presencia al ambiente mágico del mercado que subvenciona la Fundación Melilla Ciudad Monumental con unos cien mil euros y que organiza la empresa La Fragua de Vulcano.

Al término del recorrido, el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, afirmó que esta catorce edición del mercado medieval reconvertido en Renacentista "está más ambientado, más decorado que en otras ocasiones", porque se ha ocupado desde el Foso del Hornabeque, a la Plaza de Armas, la de los Aljibes y el resto del casco antiguo. Además indicó que 190 personas se encargan de dar vida a este montaje, incluyendo a melillenses con sus puestos. Invitó a los melillenses a disfrutar de estos tres días de mercado, aunque dijo que el público acude sin problemas, porque el mercado se ha convertido "en algo tradicional en la ciudad, como una fiesta clásica" que anima a los melillenses a acudir. Imbroda felicitó tanto a la presidenta de la Fundación Ciudad Monumental como al resto de personas que han hecho posible este éxito.

En definitiva, se espera que miles de melillenses y visitantes del país vecino acudan al Mercado Renacentista a lo largo de este fin de semana, para recorrer las calles del casco antiguo, los variados puestos y disfrutar de las atracciones previstas.

Sin lugar a dudas a nadie deja impasible este mercado de corte añejo, ya sea por el encanto de los pasacalles, o por la amplia oferta gastronómica y de productos artesanales. Merece la pena perderse por las calles del Pueblo durante unas horas porque para volver al futuro sólo hay que bajar los peldaños de la Puerta de la Marina y volver a la cotidianeidad de una luminosa Melilla rendida con coquetería a un más que cálido verano.

Loading

Jesús Andújar

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€