Un homenaje frente al Palacio de la Asamblea sirvió ayer para que Melilla recordara al edil del PP de Ermua Miguel Ángel Blanco, cuando se cumple el vigésimo aniversario de su secuestro y posterior asesinato por parte de ETA, y a todas las víctimas de esta banda terrorista. Durante el acto se leyó un manifiesto, en el que Melilla ofrecía su gratitud y reconocimiento a Blanco y todas las víctimas del terrorismo, y se guardó un minuto de silencio. Tras el acto, al que asistieron representantes de todos los grupos políticos de la Asamblea, otras autoridades y ciudadanos melillenses, el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, pidió que se anteponga el interés en la defensa de la memoria de las víctimas del terrorismo “por encima de cualquier veleidad o contingencia política que aconsejara hacer otra cosa”.
Imbroda, en declaraciones a los periodistas, aseveró que la memoria, el recuerdo y el respeto hacia las víctimas “tienen que estar siempre presentes” y “es inamovible”.
“Siempre tendremos en la memoria el recuerdo de Miguel Ángel Blanco y todas las víctimas del terrorismo”, afirmó el presidente melillense Imbroda, convencido de que nunca se puede dejar de olvidarlas ni de agradecer lo que hicieron por el resto de la sociedad, la libertad, la democracia y la posibilidad de vivir en paz.
“Ha ganado Miguel Ángel Blanco y han ganado las víctimas, porque con su memoria hemos acabado con aquellos terroristas, que parecía que era inacabable”, agregó.
En su opinión, el Espíritu de Ermua que surgió tras el secuestro y asesinato del joven edil hace 20 años se formó “la pinza” que permitió “acabar con ETA hace tiempo”, formada por la sociedad “que se lanzó a la calle para decir a los canallas ‘no nos asustáis, vamos a por vosotros’”, y la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
“Parecía imposible y que no había esperanza, pero fuimos capaces todos unidos de acabar con aquellos canallas, que están hoy todos en las cárceles y se están pudriendo donde tienen que pudrirse”, aseveró Imbroda, que afirmó que la indignación que surgió contra la banda hace 20 años “hoy perdura”.
Imbroda apuntó que el homenaje que se rindió ayer a Miguel Ángel Blanco se hizo extensible “a todos los ciudadanos que fueron vilmente asesinados por ETA”, a cuyos familiares expresó su apoyo, solidaridad, reconocimiento y cariño, además de agradecimiento “por lo que han hecho”.
Partidos de la oposición
Por su parte, el presidente de Coalición por Melilla y líder de la oposición, Mustafa Aberchán, expresó el compromiso y solidaridad de su partido con todas las víctimas del terrorismo, y consideró que actos como el de ayer son una oportunidad “para acordarse de todos los que sufren la peor expresión de violencia, que no discrimina a nadie”.
“El terrorismo es la amenaza más firme que tiene la sociedad democrática, y debe ser el compromiso más firme de los que creemos en los valores democráticos”, añadió el líder cepemista, que abogó por la unión y la convivencia “sin debate, discrepancia ni interés político para condenar, perseguir y rechazar “ el terrorismo.
En este sentido también se expresó la secretaria general electa del PSOE de Melilla, Gloria Rojas, que dijo que ante todo tipo de terrorismo la ciudadanía y los partidos políticos deben estar unidos porque además, es un tema de Estado que toda la sociedad debe erradicar en España y cualquier punto del mundo.
Por su parte, el coordinador de Ciudadanos Melilla (Cs), Eduardo de Castro, pidió que no se olvide lo que ocurrió hace 20 años porque “un Pueblo que olvida, ya sabemos lo que pasa”.
