Hace pocos días que el conocido mausin que se celebra en la Zawiya Alawiya de Melilla ha concluido con la venida al mismo de muchos peregrinos venidos de todas partes de Marruecos, España, Egipto, Estados Unidos y Canadá. La verdad es que resulta curioso que una festividad que comenzó con la intención de que el campesinado proveniente de los alrededores de Melilla diera gracias a Allah por la cosecha, ahora que ya no existe prácticamente laboreo agrícola en la zona, dicha festividad haya permanecido con la misma fuerza, o más si cabe que en sus inicios.
Yo he participado de esta festividad durante los primeros años de mi llegada a Melilla, después lo dejé. Y lo hice precisamente, por la información recibida de muchos musulmanes con respecto a la infinidad de innovaciones que cometen las zawiyas o cofradías sufíes.
Al saber que durante esta celebración iban a venir unos viejos amigos sufíes provenientes de Granada, concretamente Moravitum Darquawi, vine al mausin para hablar con ellos y tener un encuentro. Y lo tuve. Precisamente con Abdelgani Melara, quien tradujo el Corán al Castellano hace ya algunos años y con el máximo responsable de la Mezquita Mayor de Granada. Entre tema y tema, le pregunté por una de las grandes innovaciones de quienes acusan a los Sufíes…La Imara (danza conjunta, en la que mediante cánticos rítmicos existe un ejercicio de hiperventilación).
Yo les expuse que la Imara, según algunos sabios, es un ritual que los emigrantes musulmanes cogieron del chamanismo abisinio, y una vez retornados a Medina, cuando nuestro Profeta QALB, les llamó para que se estableciesen definitivamente con Él, ellos la mantuvieron en algunas celebraciones, incluso previas a ejercicios de práctica militar, y aunque el Profeta QALB nunca la practicó, la permitió…
Lo cierto es que mis argumentos no me los refutaron…Pero consideraron que esas fuentes deberían de ser sacadas de fuentes láicas fuera del Islam. La Imara, según los representantes darquawis con quienes hablé, posiblemente fuera una introducción novedosa que algunos maestros espirituales enseñaron a los devotos de la fe. Y ello es debido a que el mismo Abdelgani, que conoce muy bien la historia del Islam, no reconoce ninguna práctica parecida en los años posteriores al Califato establecido en Medina donde se hable o conste la práctica de dicha danza.
Yo ante dichas afirmaciones me quedé algo perplejo, ya que ¿cómo es que los sufíes saben que la Imara es una innovación y la practican entonces…Sabiendo que las innovaciones están prohibidas?…Su respuesta fue bien clara: La Imara no es un fin en sí misma, si así lo fuera, sería una innovación evidentemente. La Imara es un ejercicio espiritual que se practica para ser más receptivo a la audición del Corán y a escuchar un durús que tenga cierta trascendencia, cosas ambas que no son ninguna innovación, sino que tienen grandes beneficios para quienes lo hagan.
El verdadero problema es que en Marruecos la mayor parte de los sufíes van a las zawiyas precisamente a hacer la Imara como un fin en sí mismo. No a escuchar el Corán después de la misma. ¡Es más! Después de la misma a veces no se hace nada, ya que en muchos lugares puede ser el punto final a la reunión. Y esto sí es una innovación.
He creído conveniente escribir este artículo porque sé que en Melilla hay personas que practican estos ejercicios y opino que es pertinente que sepan la opinión de un experto en historia del Islam, de quien yo mismo aprendí cosas que no sabía.
PIE DE FOTO:
La Zawiya Alawiya de Melilla reunió el pasado fin de semana a más de 2.000 musulmanes venidos de Europa y Marruecos
