Melilla ha cerrado el primer semestre del año con una bajada del 5,2% en las infracciones penales, según los datos del último Balance de Criminalidad, facilitado ayer por el Ministerio del Interior con los datos de la Guardia Civil, el Cuerpo Nacional de Policía y la Policía Local. De esta manera, se consolida la tendencia a la baja de los últimos meses, después de que nuestra ciudad cerrara el año pasado con un descenso de algo más de un punto en las infracciones penales, y el primer trimestre de este 2017 la bajada fuera del 2,8%. Todas las infracciones penales han bajado o se han mantenido invariables en Melilla entre enero y junio de este año, a excepción de las sustracciones de vehículos, que han aumentado un 20,8%. Los datos de Interior reflejan que Melilla ha pasado de los 2.371 delitos y faltas denunciados en el primer semestre de 2016 a los 2.247 del mismo periodo de este año. De ahí el descenso del 5,2% de las infracciones penales.
Según informó ayer la Delegación del Gobierno, estos resultados sitúan la tasa de criminalidad por cada mil habitantes en 54,7. Esto supone una mejora del dato de cierre de 2016, que ya finalizó con un punto menos que en 2015 y con casi 7 puntos menos que en 2011, año en que la tasa media de criminalidad fue de 63,0 infracciones.
Hay que remontarse al año 2014 para encontrar parámetros similares en la tasa de criminalidad a los que se han registrado al finalizar junio, ya que entonces la tasa se cifró en 54,6, la más baja de los últimos doce años.
También hay buenos resultados en el esclarecimiento de las infracciones penales, que ha sido de un 4,4% más que 2016, al pasar del 55,5% de finales de 2016, al 59,4% actual. Al igual que en la tasa de criminalidad, es el mejor porcentaje de los últimos 12 años.
Infracciones que bajan
El Balance de Criminalidad refleja que la mayoría de las infracciones penales han registrado descensos, y que buena parte también se mantienen inalterables en la comparativa con el primer semestre del año 2016.
Empezando por las bajadas, el delito de tráfico de drogas es el que más baja, un 54,5% (de 55 a 25), además de los homicidios dolosos y asesinatos consumados, que han bajado un 25% (de 4 a 3). También han caído los robos con fuerza en domicilios, una infracción que se disparó el año pasado y que ahora ha bajado un 23,3% (de 73 a 56).
De igual modo, acaban con variable negativa los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria, que han bajado un 19,2% (de 52 a 42); los hurtos, que bajan un 16,3% (de 646 a 541), los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones, con un descenso del 16,1% (de 93 a 78); y los robos con violencia e intimidación, que bajan un 3,4% (de 179 a 173).
Es significativo el descenso de estas dos últimas infracciones penales, pues en el balance anterior, relativo al primer trimestre del año, habían aumentado. Se ha conseguido, por lo tanto, revertir la situación en dos de los delitos que mayor alarma social provocan.
Se mantienen igual
En este balance de Interior, que sirve como indicador de la seguridad ciudadana, hay varios indicadores que se mantienen inalterables respecto al primer semestre del año pasado. Es el caso de los homicidios dolosos y asesinatos consumados (0), los secuestros (0), los delitos contra la libertad e indemnidad sexual (14), y las agresiones sexuales con penetración (0).
Sólo hay, por lo tanto, un incremento en el apartado de sustracciones de vehículos, que aumentan un 20,8% (de 48 a 58). Esta infracción penal ya había subido en el anterior balance un 7,7%, por lo que se dispara la tendencia alcista del inicio del año.
