La Legión cumplió ayer el XCVII aniversario de su fundación en Melilla, con el Tercio I Gran Capitán, cuyo acuartelamiento ayer se vistió de gala para celebrar esta señalada efemérides. Con los legionarios y el resto de soldados de otras unidades que componen nuestra guarnición, el nombre de Melilla queda siempre bien alto gracias a su buen hacer dentro y fuera de las fronteras españolas, algo de lo que podemos sentirnos tremendamente orgullosos Melilla y el Ejército español han ido de la mano durante cientos de años. Concretamente, desde 1497. El pasado domingo se cumplió el 520 aniversario de ese estable matrimonio que mantiene nuestra ciudad con las Fuerzas Armadas de España. Una relación no solo muy duradera, sino que también se ha visto fortalecida con el paso de los años, porque a nadie se le escapa que Melilla no se entendería sin el Ejército, ni el Ejército sin Melilla.
Y es que una de las señas de identidad de Melilla es su historia ligada a la milicia. Durante décadas, nuestra ciudad fue conocida por ser uno de los principales destinos para hacer el servicio militar obligatorio. Pero además de la ya extinguida mili, la tradición castrense en Melilla se remonta a varios siglos atrás. Como hemos mencionado al inicio de este Editorial, el nacimiento de Melilla como ciudad española vino acompañado de la creación de la Compañía de Mar, que es la unidad más antigua del Ejército de España. Aquí también fueron fundadas dos de las unidades militares que más fervor despiertan entre los españoles, la Legión y los Regulares, que en cada desfile reciben los aplausos más cuantiosos y cariñosos.
Precisamente la Legión cumplió ayer el XCVII aniversario de su fundación en Melilla, con el Tercio I Gran Capitán, cuyo acuartelamiento ayer se vistió de gala para celebrar esta señalada efemérides. La semana pasada se había especulado con que la ministra de Defensa podría estar presente en este acto en nuestra ciudad, ya que en el Congreso de los Diputados se había excusado la ausencia de Cospedal en la sesión de control al Gobierno para acudir a un acto en Melilla. Finalmente no ha sido así porque la ministra estuvo ayer celebrando el aniversario de la Legión en Viator (Almería), y su agenda, publicada en la web de Defensa, no recoge ningún viaje a nuestra ciudad esta semana. No se sabe si esto obedece a un error informativo o a un cambio de decisión de última hora en el Ministerio, aunque ayer Cospedal afirmaba a kilómetros de aquí, donde nació la Legión, que esta es una de las unidades «más reconocidas y queridas por la sociedad española por su vocación de servicio».
«La Legión se ha hecho acreedora de ese reconocimiento y afecto del pueblo español por el constante ejercicio de los valores recogidos en su credo y por su trabajo, por el que quiero felicitarles y darles las gracias, ya que si hablamos de unidades de élite dentro del Ejército español tenemos que hablar de la Legión», afirmó con decisión la ministra de Defensa. También señaló lo «necesario» de la presencia de las tropas españolas en «países tan lejanos a nuestras fronteras» para «defender los intereses de nuestro país» y se ha referido a esa presencia en misiones internacionales como «un auténtico orgullo para España».
De eso sabemos mucho en Melilla, gracias a la entrega y el trabajo ejemplar de nuestros soldados, entre ellos los legionarios, que no dudan en participar en cuantas misiones se presentan. Con ellos, el nombre de Melilla queda siempre bien alto gracias a su buen hacer dentro y fuera de las fronteras españolas, algo de lo que podemos sentirnos tremendamente orgullosos en esta ciudad.
