La plantilla de C.D. Gimnástico Melilla reanudó los entrenamientos el pasado lunes, con vistas a preparar el partido de Liga de la segunda jornada del próximo sábado ante su afición, en el Pabellón Municipal Lázaro Fernández, ante el BM. Colomer Dental de Algeciras, a partir de las seis de la tarde. Los melillenses afrontarán este encuentro con el objetivo de sumar la primera victoria del campeonato, tras perder el pasado domingo en Málaga, frente al GAES Balonmano, por 34-22. Sin embargo, el club que preside José Luis Torrecilla se encuentra en plena negociaciones para reforzar su plantilla en el puesto de lateral zurdo, tras la petición realizada por su entrenador Faisal Salmi.
Así, el dirigente del Gimnástico Melilla informó que el interés está centrado en un lateral zurdo de origen brasileño, que la pasada temporada jugó en la liga de su país, aunque reconoció que el jugador de la primera línea se ha disparado en sus pretensiones económicas, por lo que espera que se ajuste al presupuesto del club amarillo.
No obstante, avanzó que en caso de no concretarse dicho fichaje, la dirección deportiva también está en contacto con otro lateral zurdo, aunque en este caso de origen cubano.
En otro orden de aspectos, los recientes fichajes David Enríquez y Borja Campoy se han incorporado a la plantilla para iniciar los entrenamientos, mientras que el joven Riduan Butieb continúa con su recuperación, tras ser operado a primeros del presente mes de septiembre del hombro izquierdo. Además, el club está a la espera de recibir el transfer del húngaro Peter para que pueda debutar este sábado ante el cuadro gaditano.
Por su parte, el próximo rival de los melillenses se presentará en el Pabellón Municipal Lázaro Fernández con la intención de resarcirse de la derrota del pasado fin de semana ante el Balonmano Montequinto por 26-35. El Algeciras comenzó el partido con dudas, dejando que su rival se distanciase de cuatro tantos, pero el coraje de los locales y el fuerte empuje de la grada hizo que el partido se igualase, concluyendo el primer tiempo por 16-18.
Sin embargo, el arranque de la segunda mitad no fue bueno, con un juego con pocas ideas y con falta de entendimiento en defensa, unida a una portería poco acertada, circunstancia que aprovechó el cuadro sevillano para dispararse en el marcador con el mencionado 26-35.
