Yo diría además, que es un riesgo individual para cada persona porque de la afectación individual, mediante el contagio, supone la propagación infectiva a toda la comunidad.
Es necesario recordar, y además muy importante, que la Gripe es una enfermedad de tipo vírico y las enfermedades de tipo vírico no se curan con antibióticos. Muchos jugamos a ser sanitarios y ante situaciones infecciosas, o febriles arremetemos con antibióticos a tuttiplen. Otro de los muchos errores del uso indiscriminado de antibióticos que además de no curar el proceso llega a crear resistencias a esos fármacos. Otro dato a tener en cuenta es la diferenciación entre Resfriado Común y Gripe, que solamente son equiparables en que ambas infecciones son víricas pero con una sintomatología muy suave de la primera con respecto a la segunda.
La Gripe puede llegar a causar la muerte en personas de RIESGO, como son los enfermos diabéticos, enfermos con patologías cardíacas, respiratorias, enfermos con inmunodeficiencias (Faltas o disminución de defensas propias), etc. Por tanto lo que procede, dicho lo anterior, para minimizar o acabar con la infección es proceder a la VACUNACIÓN CONTRA LA GRIPE. No hay otra alternativa. Y se deben vacunar todas aquellas personas por encima de los 65 años, personas de riesgo como otras que pueden estar en contacto con ellas y las que por ser profesiones públicas puedan llevar un menoscabo de sus actividades, como Personal Sanitario, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Personal de Protección Civil, Personal Docente y en general todo el personal que trabaje para las Administraciones Públicas.
Por tanto no dejes pasar la Campaña otro año más y ¡VACÚNATE!
