“Sexilio de ida y vuelta”, poemario finalista en el Premio Internacional de Poesía Ciudad de Melilla en 2012, de Elena Fernández Treviño, está plagado de referencias a la literatura y la poesía femenina a o de mujeres pero, a la vez, su autora señaló a MELILLA HOY que se trata de una obra que conlleva un guiño a no dejar a nadie fuera ya que no solo reivindica la identidad de ser mujer sino cualquier identidad que respire libertad. En definitiva, se trata de romper con las etiquetas que es lo mismo que romper con las identidades binarias, hombre, mujer. El libro abre todas las posibles sexualidades desde la libertad. La obra poética se compone de tres partes una más filosófica, otra central con mas guiños feministas y una tercera que habla del amor como regreso.
En su título figura sexilio, una palabra que no existe pero que une sexo y exilio. “No se trata de exiliarse del sexo, porque yo no quiero, -dijo-, exiliarme de ningún lugar sino que es una especie de viaje de ida y vuelta”.
La autora explica que “es exiliarse para volver, como una especie de regreso al origen .
Y para la melillense, la forma de volver a esos orígenes se sustenta en el rastro de todas las mujeres que han creado literatura y poesía femenina. “Es como recorrer las huellas del origen rastreando el hilo de la historia para volver a estas raíces femeninas del cuerpo en sus palabras”.
Viaje de ida y vuelta
En ese viaje de ida y vuelta se produce “un rastreo de uno mismo y al mismo tiempo en un recorrer que busca el origen materno, en ese lugar materno, ya que al final la madre es la que nos enseña el lenguaje de las palabras y el lenguaje primigenio de como se nombran las cosas”. Elena Fernández considera que “luego todo eso te lo roba un poco el patriarcado y para volver a recuperalo tienes que rastrear de ti mismo y de las otras·.
