El diputado del PP por Melilla, Jorge Hernández, consideraba que no existía contradicción entre las críticas que hizo un año atrás contra el Tratado de Amistad, Buena Voluntad y Cooperación, y la postura final que había adoptado su grupo en el Congreso. Para el parlamentario, el "sí" del PP al acuerdo con Marruecos no se debía interpretar como una aceptación de la llamada "célula de reflexión" sobre Ceuta y Melilla. Muy al contrario, Hernández Mollar, pensaba que las advertencias del PP sobre la forma en que debía interpretarse el convenio desterraban, por parte de este grupo político, cualquier tipo de interpretación que en tal sentido pretendiera darse a la ambigua cláusula sobre contenciosos territoriales que incluía el acuerdo. El diputado del PP por Melilla, Jorge Hernández, consideraba que no existía contradicción entre las críticas que hizo un año atrás contra el Tratado de Amistad, Buena Voluntad y Cooperación, y la postura final que había adoptado su grupo en el Congreso. Para el parlamentario, el "sí" del PP al acuerdo con Marruecos no se debía interpretar como una aceptación de la llamada "célula de reflexión" sobre Ceuta y Melilla. Muy al contrario, Hernández Mollar, pensaba que las advertencias del PP sobre la forma en que debía interpretarse el convenio desterraban, por parte de este grupo político, cualquier tipo de interpretación que en tal sentido pretendiera darse a la ambigua cláusula sobre contenciosos territoriales que incluía el acuerdo.
