El C.D. Melistar sufrió un severo correctivo en la matinal de ayer miércoles en la localidad jiennense de Mancha Real, donde cayó derrotado por 5-1, en un partido que ya perdía claramente a los nueve minutos de la primera mitad por 3-0 y que seis minutos antes del descanso encajaron dos tantos más, aunque en la segunda mitad los andaluces bajaron el pie del acelerador y los melillenses consiguieron el gol del honor en el 62′. Nueva derrota del equipo de Felipe Sánchez, que no ha ganado aún en la Liga y que sigue hundido como colista en la clasificación, a 14 puntos de distancia de los puestos de la permanencia. No encontró rival alguno el Mancha Real en un Melistar que se anunciaba flojo, pero nadie se esperaba que hasta el extremo visto ayer miércoles. Un minuto de juego les bastó a los manchegos para dar carpetazo al encuentro y eso que el entrenador Rizos aprovechó que era el colista el que tenía enfrente para dar descanso a hombres tan importantes en plantilla como Bauti o Quesada, que ni entraron en la convocatoria. El once puesto sobre el césped, con Paredes y Miguel Barrio como representantes de la cantera, era un arma de doble filo, pero los melillenses acabaron cortándose con ambos.
La goleada, en la 1ª mitad
La fiesta comenzó bien pronto en el Estadio de La Juventud, ya que partido no hubo. Más le habría valido al Melistar ahorrarse el dinero y los kilómetros del desplazamiento, ya que aún no se habían bajado sus futbolistas del autobús cuando ya perdían por dos a cero. En la primera jugada del partido, y ante la parsimoniosa mirada de la zaga melillense, Manu Castillo controló el balón de espaldas a la portería y le dio la dirección y fuerza justas para hacer el primero. Se sacó de centro, pero bien podrían haberse quedado en el mismo los jugadores que lo hicieron porque Paredes, recibiendo solo en la izquierda, segundos después, mandó repetir el saque con el dos a cero ya en el luminoso.
Podría haber sucedido eso por tercera vez consecutiva si Jesús no hubiese sacado una mano espectacular en un remate de volea de Eu y a todo esto recordemos que no se había llegado aún al minuto cinco de partido. Ya entonces, el Melistar era una marioneta cuyos hilos manejaba el Mancha Real a su antojo. Decidieron los verdes que el choque había que matarlo, si no lo estaba ya, y lo hicieron en una jugada bien trenzada que acabó con Eu cediendo el balón a la luna del área para Albertillo. El tiempo que tuvo el capitán para disparar a la escuadra izquierda (todo el del mundo) deja a las claras por qué el cuadro melillense es el colista destacado de la categoría.
Levantó el pie del acelerador el conjunto de Sierra Mágina, pero es que de no haberlo hecho el resultado podría haber sido escandaloso; más aun de lo que lo fue.
El Mancha Real se dedicó a monopolizar el balón y a dosificar sus esfuerzos. No le hizo falta ninguno a los de Rizos para hacer el cuarto. Miguel Barrio, casi convertido en extremo, encontró el espacio a la espalda del lateral izquierdo melillense. Recibió allí, miró al segundo y, al ver allí a Eu, se la puso en la cabeza para que este sólo tuviese que empujarla.
Pese a que el choque carecía de intensidad, tuvo el conjunto manchego la sangre fría de no dejarse ir y seguir generando ocasiones desde la máxima tranquilidad, aunque el quinto tanto no tardaría en llegar. Sergio Torres, con la zurda y desde casi la banda derecha, imprimió al balón de una preciosa rosca que lo llevó justo a la escuadra izquierda de la portería visitante.
La segunda mitad tuvo un comienzo completamente distinto al de la primera. La desidia se apoderó del ritmo del juego y el público pasó a pensar más en la comida que esperaba en casa que en lo que sobre el césped sucedía.
Sin embargo, llegó el gol del honor de los visitantes, en la única ocasión de gol. En el minuto 60, Cassano empujó el cuero a la red, tras el lanzamiento de un saque de esquina.
El carrusel de cambios en los locales hizo que estos volviesen a apretar y enseguida consiguieron sacar de nuevo los colores a los melillenses, aunque el resultado de 5-1 ya fue inamovible.
