Muchos melillenses lloran la muerte de Chiquito de la Calzada, el humorista que marcó una etapa con su peculiar forma de hacernos reír. El artista natural de Málaga tuvo una ligazón con Melilla, donde ya venía a actuar como cantante de flamenco cuando aún era un desconocido para el gran público, en concreto para fiestas privadas como una organizada por el entonces secretario general del Ayuntamiento Alfredo Meca Pujazón, y posteriormente, cuando ya era una estrella del humor español. Así es como vino a nuestra ciudad cuando estaba en la cresta de la ola de la fama a la que le aupó su singular forma de contar chistes, en concreto en febrero de 1995 para amenizar una gala del carnaval melillense. Las muestras de pésame en las redes sociales se han sucedido y entre ellas las del presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José Imbroda, que retuiteó tanto el mensaje de la Casa Real como la de su hermano y ex seleccionador nacional Javier Imbroda. "Se nos fue Chiquito de la Calzada, descanse en paz. Una buena persona, nos dio ratos para el recuerdo y nos dejó una sonrisa, siempre tan necesaria…" ha escrito el ex técnico de la Unicaja y Real Madrid Javier Imbroda.
El coordinador de Ciudadanos en Melilla, Eduardo de Castro, también ha escrito un mensaje dando sus condolencias: "Un genio del humor que cambió nuestra forma de hablar y de reír. Una enorme persona. Descansa en paz, fistro".
El popular humorista malagueño Chiquito de la Calzada falleció la madrugada del sábado a los 85 años en Málaga, donde permanecía hospitalizado por la angina de pecho que sufrió a finales de octubre.
Este artista, que inventó en el humor un nuevo lenguaje y estilo con gran éxito de público, tuvo que someterse a un cateterismo cardíaco hace una semana en el Hospital Regional de Málaga y padeció después una infección. Gregorio Esteban Sánchez Fernández, su nombre real, que también fue cantaor y actor, tuvo que ser trasladado el 6 de noviembre a la Unidad de Cuidados Intensivos del centro sanitario -donde continuaba desde entonces- para ser tratado de la infección.
La misma condicionó un deterioro hemodinámico y, aunque registró una mejoría en los últimos días, su estado había empeorado a lo largo de este viernes hasta fallecer a las 2.20 horas de hoy sábado. El cómico, creador de un particular vocabulario que corrió de boca en boca, había tenido que acudir a este hospital en otra ocasión previa en el mismo mes: fue ingresado durante tres días al sufrir una caída por la que tuvo que ser rescatado el pasado 14 de octubre en su vivienda.
Sus familiares tuvieron que avisar aquel día a los bomberos porque Chiquito no respondía y no podían entrar al inmueble, en la capital malagueña, al estar las llaves puestas por dentro.
Al acceder a la vivienda, lo encontraron en el suelo sin poder levantarse y fue trasladado al centro sanitario.
Poco después señaló en su cuenta de Twitter que había tenido "una pequeña caidita de Roma, pero la cosa pinta bien", y en otro tuit añadía: "solo ha sido una caída físicamente". El humorista recibió desde entonces numerosas muestras de cariño a través de redes sociales.
Nació en 1932 en el barrio de la Trinidad, en Málaga, en el lugar conocido como Calzada de la Trinidad, de ahí su nombre artístico.
A los ocho años tuvo su primer contacto con el flamenco y, aunque participó en numerosos cuadros flamencos con artistas de talla mundial, la fama le llegó a los 62 años por sus dotes para el humor. Fue nombrado Hijo Predilecto de la provincia de Málaga el pasado año, reconocimiento que consideró "una alegría y un honor", y lo premió la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (Aehcos) en reconocimiento a su trayectoria.
La capilla ardiente, instalada desde el mediodía de este sábado en la Diputación de Málaga, está recibiendo desde la apertura de puertas la afluencia de ciudadanos anónimos que quieren rendirle homenaje a Gregorio Sánchez, fallecido a los 85 años.
