La U.D. Melilla refrendó ayer domingo su mejoría, al vencer por segunda jornada consecutiva al Granada B (1-0), en un encuentro de gran igualdad, muy táctico y de escasas ocasiones, aunque los locales tuvieron esta vez, al contrario de las últimas jornadas, la suerte de cara para aprovechar el único error del meta visitante para conseguir el gol de la victoria, a diez minutos del final, con un tanto de oportunista de Nacho Aznar, que en el primer balón que tocó lo empujó al fondo de las mallas, tres minutos después de haber sustituido a Yacine Qasmi.
Los melillenses se reenganchan así a la competición, con la conquista de 6 puntos de 6, poniendo fin a una racha de cuatro derrotas consecutivas, y despiden el año con una victoria para recuperar las buenas sensaciones de las primeras jornadas de Liga. El partido en su primera mitad fue bastante igualado y con alternancias en la posesión del balón, aunque los cancerberos pasaron casi desapercibidos. Además, ambos conjuntos intentaban finalizar sus acciones para impedir el contragolpe adversario.
Los visitantes saltaron al terreno de juego con el claro objetivo de impedir que el Melilla llevara la iniciativa de juego, sorprendiendo con dos acciones consecutivas con las que estuvieron cerca de adelantarse en el marcador, ya que a los cinco minutos, un centro por la banda derecha se disponía a rematarlo Casi en el segundo palo, pero en última instancia apareció Josu Ibarbia para despejar el balón a córner. Andrés García botó el saque de esquina y Pablo Vázquez lo remató, de cabeza, a bocajarro, pero Dani Barrio evitó el posible 0-1, despejando de nuevo el balón a córner, aunque esta vez se lanzó sin consecuencias.
Pasados los primeros cinco minutos, el Melilla se sacudió el dominio de su rival y comenzó a llegar con cierto peligro sobre la meta de Aarón, ya que en el 12′, una serie de intentos de remates, dentro del área nazarí, lo resolvió Yacine Qasmi, que disparó fuera, bastante alto.
Los locales volvieron a intentarlo en el 25′, a balón parado, ya que Lolo Garrido ejecutó una falta, pero tras una serie de rechaces disparó Odei raso y flojo, dándole tiempo a la defensa granadina a despejar el cuero.
De nuevo volvió a la carga el Melilla, tres minutos después, en una incursión de Zelu por la derecha, que aprovechó un fallo de un defensor para controlar el cuero y pasar sobre Yacine Qasmi, pero se anticipóun defensor para despejar a córner, cuando el franco-marroquí estaba presto y dispuesto para empujar el cuero a las mallas.
La última oportunidad de la primera mitad fue de nuevo para el cuadro local, en el 38′, tras un envío de Lolo Garrido hacia Zelu, que desde la banda derecha centró templado para Yacine Qasmi, pero su remate, de cabeza, llegó manso a las manos del guardameta andaluz.
Sin apenas incidencias en las dos áreas concluyó la primera mitad, con empate a cero goles, mientras que en la reanudación apenas cambió la decoración porque los dos equipos tampoco pusieron en aprietos a los porteros. Tanto es así que sólo se produjeron dos ocasiones y fueron para el Melilla, una de ellas las del gol melillense.
El Melilla y el Granada B se repartieron la posesión del balón, pero no llegaban a la meta contraria. Los locales salieron fuertes, con una gran oportunidad de Zelu, en el 48′, que tras internarse por la banda derecha intentó picarle el balón al meta Aarón, pero éste le ganó la partida, enviando el cuero a córner.
A partir de entonces, la afición se aburrió, ya que la Unión Deportiva y el filial granadino no eran capaces de pisar área, pese a los intentos de los jugadores de ambos conjuntos por llevar la iniciativa en el juego, aunque finalmente las defensas se imponían a los ataques.
El partido entraba en su recta final y el empate parecía que sería el resultado definitivo, aunque el técnico local, Manolo Herrero, movió su banquillo y dio entrada a Nacho Aznar, sustituyendo a Yacine Qasmi, que hizo un gran trabajo de desgaste pero sin suerte, la que sí tuvo su compañero Nacho Aznar, ya que a los tres minutos de sustituirle logró el gol de la victoria, tras un centro por la banda izquierda de Jilmar, Mahanan remató de cabeza, pero el cancerbero Aarón resbaló y no logró atajar el balón, lo cual aprovechó Nacho Aznar para marcar el gol de la victoria, que sitúa de nuevo al Melilla cerca de las posiciones de privilegio.
