Con empate a cuatro goles finalizó el tradicional encuentro navideño de fútbol, disputado el pasado sábado en el Campo de La Espiguera, entre la Real Federación Melillense de Fútbol y la Asociación de la Prensa Deportiva de Melilla. Era la primera vez que se daba una igualdad, lo que contituyó que los capitanes de ambos cuadros decidieran que no habría ni prórroga ni lanzamiento de penaltis. Todos estaban contentos. Y no era para menos, porque, un año más, la mañana apareció radiante, auténticamente primaveral, lo que motivó una buena asistencia de espectadores al campo federativo, conscientes de que siempre es interesante ser testigos directos de una auténtica fiesta deportiva, donde queda evidenciada la enorme sintonía existente entre federativos e informadores.
Y mucho más cuando en esta ocasión, al contrario de lo acontecido en otras, el colegiado Colombo evidenció unos progresos y un saber estar y hacer sobre el césped sintético, tan extraordinarios que merecieron las felicitaciones unánimes de todos, tanto jugadores como directivos y técnicos.
Por primera vez en muchos años se apartaron las discusiones sobre jugadas claves y Colombo vino a unirse a la fiesta. Hasta tal punto llegó la deportividad que un precioso tanto marcado por Santi Pérez, que hubiera supuesto la victoria de los informadores, ni siquiera fue protestado. Enhorabuena.
El defintivo 4-4 fue un fiel reflejo de lo acontecido sobre el terreno de juego, aunque nada hacía presagiarlo por cuanto el combinado de informadores salió con una actitud inusual y en solo diez minutos había conseguido dos goles de ventaja. Una ventaja que se mantuvo durante mucho tiempo, aunque en el seleccionado federativo, a medida que pasaban los minutos, se evidenciaba el deseo de no salir derrotados bajo ningún concepto.
Una actitud en la que tuvo muchos que decir gente tan importante como Nacho Escobar, bajo los palos, los veteranos Agustín Martínez, junto a Joaquín Huertas, Laarbi, Mohamed, Kemel y Luque, a quienes se unieron los ex-jugadores profesionales Yamal y Orta, que junto a la incombustible Lorena Asencio (reciente Premio Trayectoria Deportiva de la APDM) fueron consiguiendo que las cosas se pusieran en su sitio.
La igualdad fue total durante mucho tiempo, ya que los periodistas deportivos, reforzados por los ex-jugadores azulinos Manolo y Eloy Marteache, así como por Luisfer Pérez, director general de Geeppard Equipaciones, plantaron cara en los momentos decisivos, impidiendo que la victoria volviera a caer para los federativos.
Con otra excelente actuación del meta Carlos Giz, bien acompañado en el campo por Juan Carlos Parra, Nacho Samper, Fausto Mas, Carlos Busto, Santi Pérez, Kada y Sufi, apenas se dejó sentir la ausencia por lesión de Ricardo Fernández ‘Ricky’, que, desde la banda, se convirtió en uno de los grandes animadores de su equipo.
Manolo, con un doblete, Sufi y Eloy fueron los goleadores de los informadores, que estuvieron perfectamente dirigidos en la banda por el miembro de la APDM, Felipe Fuertes, mientras que el equipo de federativos tuvo, como primer técnico, a José Martínez ‘Yeye’.
Comida de hermandad
Y para poner broche de oro, la Real Federación Melillense de Fútbol ofreció una comida de hermandad en las propias instalaciones de La Espiguera, que estuvo presidida por los titulares de la Federación, Diego Martínez, y de la APDM, Avelino Gutiérrez, junto al consejero de Educación, Juventud y Deportes, Antonio Miranda, que no quiso perderse la fiesta.
Los asistentes degustaron sendas paellas elaboradas por Hassan Ahmed y Juan José Pedreño, quienes recibieron las mejores felicitaciones También asistieron la práctica totalidad de los componentes de los equipos que disputaron el choque, algunos de ellos acompañados de sus esposas, brindándose porque esta unión y camaradería, perdure en el tiempo y haciéndose votos porque el nuevo año sea, para todos los equipos melillenses, aun más fructífero y exitoso que el que dentro de unos días finaliza.
