España es el país de la Unión Europea que aplica las multas más elevadas a los delitos por falsificación de medicamentos, según consta en un informe de la Comisión Europea publicado esta semana, en el que se especifica que pueden alcanzar el millón de euros en los casos más graves. El estudio publicado por el Ejecutivo comunitario se centra en la aplicación de sanciones contra aquellos delitos cometidos por personas en la producción y distribución de medicamentos falsos y muestra una "amplias" diferencias entre los Estados miembros.
Sanciones
Todos los países del bloque comunitario aplican multas, ya sean penales o administrativas, a estos delitos. Ocho países sólo cuentan con multas penales, mientras que otros siente solo imponen sanciones administrativas. España forma parte del grupo de 13 países en los que se contemplan multas de los dos tipos.
Sin embargo, las multas varían desde los 4.300 euros en Lituania hasta el millón de euros que se puede llegar a imponer en España que, no obstante, fija la cuantía según el delito y únicamente se impone la máxima los casos "muy graves".
Por otro lado, las penas de prisión por falsificación de medicamentos oscilan entre un año (en Suecia, Finlandia y Grecia) y 15 años (en Austria, Eslovenia y Eslovaquia). En España la pena por este delito es de cuatro años.
La Comisión Europea ha recordado además que los países de la UE y otros grupos de interés están trabajando en la creación de un sistema europeo de verificación de medicinas que debería entrar en vigor en febrero de 2019.
